EKAITZ SAIES

El pasado sábado se celebraron las Jornadas Técnicas de la Real Federación Española de Piragüismo en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid. Un evento que reunió a los entrenadores, analistas y directores técnicos que estuvimos en los Juegos Olímpicos de París 2024 para analizar el proceso hasta llegar a París, así como el rendimiento durante la competición.

La ocasión contó con un elenco de ponentes de altísimo nivel, reflejo de la excelencia técnica y profesional que caracteriza a nuestro equipo. Desde quienes vuelven con su sexta medalla olímpica como los que se han estrenado por primera vez en París 2024.

Estas conferencias permitieron destacar el gran progreso que ha experimentado el piragüismo en España, tanto en términos de planificación del entrenamiento como en el uso de tecnologías avanzadas. La evolución desde aquellos días en los que competía como deportista hasta hoy ha sido notable, y es alentador ver que aún hay proyectos que están todavía por despegar.

Durante mi intervención en estas Jornadas Técnicas, abordé varios temas de gran relevancia. Uno de los aspectos principales fue el análisis DAFO de la participación del equipo de sprint en los Juegos Olímpicos de París 2024, destacando las fortalezas y debilidades que observamos en el equipo, así como las oportunidades y amenazas de cara a los próximos retos. Específicamente, compartí mi visión sobre cómo podríamos aprovechar nuestros puntos fuertes, reforzar aquellos aspectos que aún pueden mejorar y superar los resultados en Los Ángeles 2028. Sin duda, los retos que se nos plantean también ofrecen una gran oportunidad para innovar y adaptarnos.

Otro de los temas que abordé fue el nuevo sistema de Ranking Mundial que ha propuesto la Federación Internacional de Piragüismo. Este cambio supone un giro en el paradigma actual de nuestro deporte, ya que redefinirá la manera en que planificamos nuestros proyectos y diseñamos los sistemas de selección. Con el nuevo sistema, no solo se modificará la forma en la que se clasificarán los equipos para los Juegos Olímpicos, sino que también se alterarán las estrategias de participación en las competiciones y el enfoque general de las planificaciones a largo plazo. Este cambio representa, en esencia, una nueva etapa para el piragüismo internacional.

En mi ponencia quise transmitir un mensaje claro: que en cada reto y en cada circunstancia adversa surge una oportunidad. Estoy convencido de que este equipo sabrá adaptarse a los cambios, con trabajo en equipo, espíritu de superación y dedicación. Los logros pasados son motivo de orgullo, pero también una fuente de inspiración para los futuros éxitos que se aspira a cosechar.